Omene nace de dos mujeres unidas por la vocación y el amor profundo hacia el cuidado de la madre y del bebé. Una de nosotras es enfermera, con un alma tranquila y manos cálidas que entienden la importancia de cada pequeño gesto en el bienestar físico y emocional. Por otro lado, tenemos a una educadora infantil que tiene pasión absoluta en acompañar a los bebes en sus primeras etapas de vida, respetando el ritmo, estimulando su desarrollo general y brindándoles amor.​

 

Juntas hemos creado este espacio como un refugio sereno, donde cada elección está hecha con mimo y conciencia.  Creemos que el cuidado durante la maternidad —y especialmente en los primeros vínculos con el bebé— es un momento sagrado, tierno y frágil. Por eso, todo lo que ofrecemos nace desde la calma, la experiencia y el deseo de hacer sentir a cada madre y a cada criatura en casa.​ Elegimos materiales ecológicos, seguros y suaves.

 

Porque la piel del bebé es delicada, y el alma de una madre reciente también. Cada detalle está pensado para envolveros en calidez y confianza, con productos que respetan el cuerpo, el entorno y los ritmos naturales.​

 

Este proyecto es nuestro pequeño homenaje al comienzo de la vida. A la lentitud de un abrazo. A la magia de un vínculo.

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Con amor,

Omene